La estructura empresarial peruana no presenta cambios sustanciales respecto de lo que ha venido ocurriendo en el pasado: la gran mayoría de las empresas son microempresas (95,0%). El estrato de las PYME presenta una baja participación, con 4,3% de pequeñas empresas y 0,2% de medianas empresas. Esta estructura, marcada por la ausencia relativa de pequeñas y medianas empresas, representa una debilidad para el desarrollo del sector privado, y de la economía en general, pues las grandes empresas no cuentan con una base sólida para la subcontratación ni una oferta de proveedores estable, de calidad y en crecimiento.
En el 2015 el 39,3% (661 mil 404 empresas) de las Mipyme tuvieron ventas anuales menores o iguales a 2 UIT, es decir, presentaron una venta promedio mensual de alrededor de 642 Nuevos Soles. Asimismo, el 85.4% de ellas se concentraron en dos sectores: comercio (44,3%) y servicio (41,1%). Estas empresas son de subsistencia cuyos ingresos les permiten cubrir por lo general necesidades básicas, como alimentación, vivienda, educación, etc.; por lo tanto, dichas empresas no tienen posibilidad de generar utilidades ni de incrementar su productividad. Por otra parte, el 26,9% de las Mipyme registran ventas anuales superiores a 13 UIT, estas tienen una mayor probabilidad de generar utilidades para mantener su capital original e invertir en el crecimiento de la empresa y por lo tanto mejorar la probabilidad de hacerse más productivas, por lo que son llamadas empresas potenciales.
Con respecto a la distribución de las Mipyme formales peruanas según el tipo de contribuyente y el estrato empresarial, la gran mayoría de las mismas se constituye como persona natural (70,6%). Sin embargo, este porcentaje varía según el estrato empresarial, donde el 73,2% de las microempresas se constituyeron como persona natural. Por el contrario, solo el 26,8% de las microempresas se constituyen como persona jurídica, en el caso de la pequeña y mediana empresa el 85,7% y 95,7% se constituye como persona jurídica, respectivamente. Vale la pena mencionar que en los tres estratos empresariales, la Sociedad Anónima Cerrada es el tipo de personería jurídica que más destaca, seguida de la Empresas Individual de Responsabilidad limitada.
La evolución de la estructura sectorial en los últimos cinco años no ha tenido variaciones significativas. En el último quinquenio, los sectores comercio y servicios concentraron aproximadamente el 85,0% de las Mipyme formales. Si bien ambos sectores han presentado mayores niveles de crecimiento durante los últimos cinco años, el PBI del sector comercio tuvo un crecimiento anual promedio de 7,8%, mientras que el del sector servicios fue de 6,8%; además, el sector comercio presentó una mayor creación de empleo, aunque reflejando bajísimos niveles de productividad.
La regiones con mayor número de Mipyme son Lima, Arequipa, La Libertad, Cusco y Piura, las que en conjunto constituyen el 66,3% del total de las Mipyme peruanas. Existe un predominio en la región de la costa en cuanto a su concentración de Mipyme, ello guarda relación con el acceso a mercados más amplios, cercanía a puertos para la exportación, así como el mayor acceso a servicios y bienes públicos en esas regiones.
En el 2015, las regiones con un mayor porcentaje de PYME (pequeña y mediana empresa) sobre el total de empresas formales son: Lima (5,7%), Loreto (4,9%), Callao (4,4%) y Ucayali (4,2%). Estos resultados reflejan que no existe suficiente PYME en nuestro país. Esta estructura representa una debilidad en el desarrollo del sistema privado, y de la economía en general, debido a que este segmento da consistencia y densidad a las relaciones interempresariales y a la asociatividad. En agregado, el número de Mipyme ha crecido a un ritmo anual promedio de 7,6% entre 2007 y 2015. Este crecimiento guarda relación con el avance de la economía, el cual fue en promedio 5,3% en el mismo periodo. Durante el periodo 2007-2015, la tasa de variación fue positiva, alcanzando el máximo en 2013 con un incremento de 12,9% en el número de empresas respecto del 2012, cabe resaltar que en el 2013 el crecimiento de la economía peruana fue de 5,9%.